BASKET SAUNA

Tal y como dice la canción "el verano ya está aquí... ya está aquí, ya está aquí / y la fiesta comenzó... comenzó, comenzó".
Martes de mucho calor. Tanto, como poder de convocatoria. Los Tiritos, otra vez más, demostraron no temerle a los elementos. Si la lluvia nunca fue un problema, el calor no iba a acongojarles.
Total, 18 jugadores dándolo todo en la cancha.
Los equipos fueron decididos por el azar. Las camisetas puestas definían sus destinos.
En un principio parecía que el equipo negro iba a machacar, pues concentraba un alta número de jugadores altos, pero los blancos no se amedrentaron y salieron a luchar.
La cosa empezó un poco fría (véase la ironía del comentario), pases erráticos, precipitación, tiros que no entraban... el rebote tanto ofensivo como defensivo resultó monopolio del equipo negro, pero lejos de generar frustación entre los pequeños, resultó un incentivo más. Artur, el rey del rebote estaba en todo. Ramón se puso el equipo a las espaldas y defendió como un poseso a la hora que rompía la zona de sus enemigos con entradas hasta la cocina. Anna, al principio, empezó con el "canell d'or" un poco impreciso pero jugada tras jugada conseguió la temperatura ideal. Hay que destacar a Julio y su don por los tapones. Igual no son super-espectaculares pues parece que se le caigan sin querer, pero Diós, sí son efectivos. Pontón resultó el complemento ideal de Julio, donde uno no llegaba, llegaba el otro. Oliver nos deleitó con un par de contraataques propios de la NBA (y no me refiero al blog de los Auró, si no a la liga Americana). Paula, como siempre fue el pulmón del equipo. Mimando el balón, dando tiempo a sus jugadores de colocarse en sus posiciones y rematando con un par de tiros interiores que desconcertaron a los rivales.
Por parte de los negros, remarcar las labores defensivas de Pepe y Sergi, jugadores incansables especializados en robar balones. Reinhard y sus rebotazos; el Cosí y su tiro exterior; el Tríplex y su perfecto juego defensivo y Guillaume, un nuevo fichaje procedente del Liceu francés que nos dió un par de lecciones tanto en ataque como en defensa.